El Gobierno de Ecuador logró refinanciar alrededor de mil 500 millones de dólares de deuda con unas condiciones muy ventajosas, mismas que le permitirán ahorrar unos 800 millones de dólares. A cambio, el país sudamericano deberá destinar 460 millones de dólares en acciones para conservar ecosistemas terrestres y de agua dulce en la Amazonia ecuatoriana.
En la operación han participado la Corporación Financiera Internacional para el Desarrollo de Estados Unidos, con un seguro de riesgo político de de mil millones de dólares; el Banco Interamericano de Desarrollo, con la emisión de una garantía parcial de liquidez crediticia de 155 millones de dólares; y Bank of America, fungiendo como único organizador y agente colocador.
De igual manera, esta conversión de deuda por naturaleza fue facilitada por el programa Nature Bonds, de la ONG The Nature Conservancy, cuyo principal beneficiario será el programa Biocorredor Amazónico (PBA).
“La operación no sólo aliviará la carga de la deuda pública, sino que también asegurará recursos sostenibles para el desarrollo del PBA. Este modelo de financiamiento sostenible ejemplifica nuestro liderazgo a la hora de abordar los retos medioambientales y climáticos en beneficio de las generaciones actuales y futuras”, declaró el Ministro de Economía y Finanzas de Ecuador, Juan Carlos Vega.
De esta forma, la Amazonia ecuatoriana recibirá 23.5 millones de dólares durante 17 años, de los cuales 19 millones se encuentran destinados a financiar el PBA y otros 4.5 millones de dólares anuales capitalizarán un fideicomiso, que se espera que genere aproximadamente 60 millones de dólares en rendimientos adicionales.
“Continuaremos luchando por un mejor planeta; por que las comunidades tengan una mejor vida; y porque mi país sea un ejemplo a nivel mundial”, concluyó el funcionario.