En los últimos tiempos, el uso de drones se ha vuelto una práctica muy popular, pues éstos ya forman parte de múltiples procesos creativos como grabar tomar aéreas, tomar fotografías panorámicas e incluso han funcionado bastante bien en tareas de vigilancia y seguridad.
Sin embargo, estos usos pueden ir más alla de la captura de imágenes, pues gracias a su fácil movilidad por los aires es posible controlarlos sobre zonas que resultan complicadas visitar a pie.
Tal es el caso de la reforestación, un proceso que con el paso de los años se ha vuelto vital para la conservación del medio ambiente, a tal grado que conforma uno de los Objetivos de Desarrollo Sostenible por parte de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
En ese sentido, el organismo señala que, para 2030, será importante luchar contra la desertificación, así como rehabilitar las tierras y suelos degradados por sequías e inundaciones. No obstante, para lograr estos avances, se deben plantar cientos de miles de semillas en zonas de difícil acceso y ese sería un trabajo que ocuparía el esfuerzo de aproximadamente 10 personas durante un mes. Pero, al recurrir a drones, esta misma tarea puede reducirse a tan sólo un día.
Lo anterior sin mencionar las muchas ventajas que aportan estos dispositivos voladores en la reforestación, como la identificación del suelo y captura de imágenes multiespectrales.
Afortunadamente, esto ha motivado algunos proyectos a favor del medio ambiente que sacan provecho de la tecnología. Ejemplo de ello es el programa de Restauración Ecológica de Precisión encabezado por Bayer, Grupo HA, Proyectos Especiales SOS y el Tecnológico de Monterrey.
Con él ya se han logrado reforestar más de 250 hectáreas de cuencas importantes en Chihuahua y Sonora, además de llevar a cabo sesiones de entrenamiento para que las comunidades cercanas colaboren en la iniciativa.
“Hubo un proceso de entrenamiento en las comunidades cercanas. Ellos realizaron la colecta, limpia y preparación de semillas para después ser dispersadas haciendo uso de drones con piezas creadas por ingenieros mexicanos”, comenta Luis martín, director de Grupo HA.
“Sacar adelante estos proyectos no es nada fácil, pero lo seguiremos intentando con tal de que los bosques mexicanos estén completos otra vez”, concluye.