Con el objetivo de reducir sus emisiones de Metano, las autoridades de China anunciaron una serie de medidas que van desde el control y la información relacionada hasta la transparencia de los datos de este gas de efecto invernadero.
A través del Ministerio de Ecología y Medio Ambiente, el gigante asiático publicó un documento en el que detalla las estrategias para disminuir las emisiones de metano, sobretodo aquellas procedentes del sector minero y agrícola.
Según el archivo, el que es actualmente el mayor emisor mundial de metano, con 28 millones de toneladas anuales, construirá un sistema de vigilancia, contabilidad, reporte y verificación de las emisiones de metano. Además, mejorará la legislación, los estándares y las políticas de incentivo económico, así como fomentar la innovación tecnológica y la cooperación internacional en dicho ámbito.
El metano es un gas de efecto invernadero con un alto potencial de calentamiento; sin embargo, controlar sus emisiones trae consigo beneficios climáticos, económicos, ambientales y de seguridad.