La empresa de materiales para construcción, Cemex, buscará suministrar diariamente alrededor de 100 toneladas de dióxido de carbono (CO2) para producir combustible de aviación sostenible.
Según la compañía con sede en el estado de Nuevo León, el componente químico provendrá de la planta de la compañía Rüdersdorf, ubicada en Alemania. Una vez en México, éste será combinado con hidrógeno verde, el cual es generado exclusivamente a partir de energía eólica y solar de la empresa Enertrag.
Posteriormente, Sasol ecoFT contribuirá con su tecnología para producir queroseno ecológico, que puede mezclarse para constituir hasta 50% del combustible para aviones.
La estrategia forma parte del programa Futuro en Acción, donde Cemex tiene como objetivo reducir su huella de carbono y contribuir a una economía circular. Además, representa un componente integral del plan maestro para desarrollar una operación con cero emisiones netas de CO2 en Rüdersdorf para 2030.
“Estamos muy entusiasmados de formar parte de este proyecto innovador que contribuirá a la descarbonización de dos de las industrias clave en el mundo”, dijo Fernando González Olivieri, director general de la cementera a través de un comunicado de prensa.