Jesús Sidonio Villazteca, médico adscrito a la Secretaría de Cultura y Deporte del Estado de México, explicó cuáles son las lesiones más frecuentes a las que están expuestos los practicantes de actividades acuáticas, como natación, natación artística, polo acuático y clavados.
Cabe destacar que para atender y prevenir lesiones, los deportistas pueden acudir al Departamento de Ciencias Aplicadas al Deporte, donde se cuenta con todo un equipo de especialistas en medicina del deporte, fisiatría, quiropráctica, acupuntura, psicología y nutrición.
Acerca de la natación, disciplina en la que el Estado de México se ha consolidado como campeón nacional durante muchos años, Sidonio Villazteca puntualizó que se trata de un deporte de menor impacto: “Sin embargo, por los movimientos repetitivos y de alto gasto energético, pueden ocasionar, desde procesos inflamatorios, hasta rupturas tendinosas y musculares, debido a las exigencias competitivas que se imponen los deportistas. Esta práctica continua provoca lesiones cuando el nadador sobrepasa su capacidad, o bien, mantiene un defecto técnico que conlleva a un daño articular”, afirmó.
Entre las lesiones más comunes resaltó la del hombro, tendinopatía del manguito rotador, bursitis subacromial e inestabilidad anterior; además, la espalda y las rodillas también pueden verse afectadas, dependiendo del estilo del nadador. Se pueden encontrar lesiones características como la epicondilitis, patología lumbar y síndrome del hombro, subluxación del hombro, hiperlordosis lumbar y tenosinovitis de los extensores del pie para el estilo de mariposa; mientras que para el estilo de pecho o braza el dolor femoropatelar, síndrome de hombro doloroso y cervicalgias; y para el estilo libre la tenosinovitis de los extensores del pie.
En la natación artística, donde se realizan numerosas repeticiones de grandes amplitudes articulares a gran velocidad, el hombro suele ser el más afectado, a lo que el médico deportivo indicó que “como en todos los deportes, la prevención de las lesiones es muy importante, por lo que se debe promover con mayor énfasis en la flexibilidad y la resistencia entre otras capacidades volitivas”, señaló.
“En el polo acuático, 80% de los atletas sufre dolor de hombro. Es muy exigente a nivel físico; tiene periodos de actividad muy intensa y muchas transiciones, además de movimientos en las piernas, las cuales carecen de un apoyo estable, por lo que aumenta la fatiga de los músculos torácicos, los hombros y la espalda. En el momento del lanzamiento del balón, la extremidad torácica está en la posición más vulnerable”, dijo; por esto, las lesiones más comunes afectan los tendones del bíceps y tríceps. También son frecuentes las luxaciones; en rodillas puede haber ruptura de ligamento colateral externo y de menisco; en manos, esguinces y luxaciones de dedos, mientras que en la cara cortes, ruptura de tímpano o fracturas faciales.
Finalmente, detalló que en los clavados las lesiones de espalda y hombro son las más comunes, incluso cuando el clavado es bien realizado, pues la velocidad que alcanza el cuerpo del atleta, aumenta la fuerza del impacto. El dolor en la región dorso lumbar se da por hiperextensión y por los giros que los clavadistas realizan durante los saltos.