El poder mexicano en los clavados se hizo sentir con fuerza en el Mundial de Deportes Acuáticos celebrado en Singapur. Gabriela Agúndez y Alejandra Estudillo lograron una destacada medalla de plata en plataforma sincronizada de 10 metros, mientras que Osmar Olvera y Juan Manuel Celaya repitieron resultado en la prueba masculina de trampolín de 3 metros.
Agúndez y Estudillo sumaron 304.80 puntos tras ejecutar una serie sólida con notas entre 6.5 y 8.0. Solo fueron superadas por la perfección china, pero vencieron sin complicaciones a las norcoreanas, quienes completaron el podio. La dupla femenil representa el presente y futuro del país rumbo a Los Ángeles 2028.
Del lado varonil, Olvera y Celaya mantuvieron la presión sobre los favoritos chinos, pero los 467.31 puntos de Wang y Zhen fueron inalcanzables. Los mexicanos, con 449.28, demostraron gran dificultad técnica y confirmaron su estatus como subcampeones olímpicos y mundiales.
Esta plata significó la séptima medalla mundial para Olvera, y la segunda para Celaya. Su entendimiento sobre el trampolín y la consistencia los mantiene como una de las mejores parejas del mundo en la especialidad.
Con estas dos preseas, México reafirma su lugar entre las potencias de los clavados. La base de talento joven, combinada con experiencia, apunta hacia una generación capaz de repetir hazañas olímpicas y seguir sumando medallas internacionales.