Este lunes, una nueva filtración que recopila archivos confidenciales de la aplicación Uber evidenció tácticas éticamente cuestionables y potencialmente que la compañía utilizó para impulsar su expansión global hace casi una década.
Denominada como “The Uber Files” (Los archivos de Uber), la investigación fue realizada entre docenas de medios pertenecientes al Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ), los cuales revelaron que representantes del servicio de transporte sacaron provecho de la reacción del gremio de los taxis contra sus conductores para obtener respaldo y evadir a las autoridades regulatorias.
En total, el trabajo periodístico recopiló poco más de 124 mil documentos durante los años 2013 y 2017, inicialmente obtenidos por el diario británico The Guardian. Los archivos incluyen, entre otras cosas, intercambios de mensajes de texto y correos electrónicos de ejecutivos, donde destaca la figura de Travis Kalanick, cofundador y expresidente, quien tuvo que renunciar a su cargo por acusaciones laborales y múltiples episodios de acoso sexual y psicológico dentro de la compañía.
Pero eso no es todo, pues la investigación también acusa a Uber de haber trabajado para evadir investigaciones regulatorias y que incluso, los altos mandos de la empresa estaban al tanto de estas ilegalidades.
“The Uber Files” representa otro duro golpe para la aplicación, que desde su fundación en 2009 ha estado acompañada por la controversia en su objetivo de convertirse en una fuerza disruptiva del transporte a nivel mundial.