China acaba de dar un golpe sobre la mesa en el mundo de las supercomputadoras, luego de confirmar que ya tiene lista su primera creación de este tipo con tecnología 100% nacional.
La denominada Central Intelligent Computing Center (CICC) fue desarrollada por la compañía China Telecom y tiene un objetivo principal bien establecido: entrenar grandes modelos de lenguaje masivos con billones de parámetros utilizando inteligencia artificial.
De la mano de CICC, el gigante asiático dio un gran paso hacia la anhelada independencia tecnológica. Y es que aunque China lidera actualmente la lista del Top 500 con 173 sistemas, hasta hace poco todavía no contaba con una supercomputadora fabricada integramente de hardware interno.