El capitalismo salvaje ha llegado al espacio exterior. Los ejecutivos de la NASA anunciaron que la agencia abrirá partes de la Estación Espacial Internacional a más oportunidades comerciales, permitiendo a las empresas el uso sin precedentes de las instalaciones, incluyendo la filmación de comerciales o películas que utilicen el espacio como concepto.
La NASA también está pidiendo a la industria espacial privada que envíe ideas para hábitats y módulos que se pueden adjuntar a la estación espacial de forma semipermanente.
Asimismo, la NASA permite a las empresas privadas comprar tiempo y espacio en la ISS para producir, comercializar o probar sus productos. También permite a que compañías utilicen los recursos de la ISS con fines comerciales, incluso haciendo uso del tiempo y la experiencia de los astronautas de la NASA. Es más, si las organizaciones lo desean, pueden enviar sus propios astronautas a la EEI a partir de 2020.
Desde luego todas estas actividades tienen un costo y es elevado.
Esto resulta ser un giro inesperado, pues durante mucho tiempo la NASA se ha pronunciado en contra de la comercialización de la Estación Espacial.
Hasta el momento, cualquier empresa que desee enviar productos a la EEI tenía que demostrar que la empresa tenía alguna característica educativa o que giraba en torno a algún tipo de demostración tecnológica. Pero ahora todo es distinto pues la NASA ha declarado que busca comercializar también la órbita terrestre baja algún día.
Ahora, la agencia espacial puede realizar misiones mucho más ambiciosas, como construir una nueva estación espacial alrededor de la Luna y enviar a los humanos de regreso a la superficie lunar. En 2018, la solicitud de presupuesto del presidente solicitó la finalización de la financiación directa para la EEI en 2025 y la cesión de las operaciones del laboratorio orbital a empresas privadas.
La Casa Blanca ya no está cumpliendo con la fecha límite de 2025 debido al rechazo de los legisladores, pero la NASA todavía está tratando de impulsar la toma de control de la órbita terrestre baja de la industria espacial privada.
El uso comercial vendrá con algunas restricciones.
La NASA está asignando el 5 por ciento de sus recursos en la estación para estas actividades comerciales.
Solo 175 kilogramos de carga comercial pueden enviarse a la EEI anualmente.
La tripulación de la NASA solo dedicará 90 horas al año a actividades comerciales.
Las misiones privadas de astronautas a la Estación están limitadas a dos vuelos por año, y los astronautas únicamente podrán permanecer ahí durante 30 días.
El uso de las instalaciones de la estación Espacial Internacional se traducirá, nada más y nada menos, en 11 mil 250 dólares por astronauta por día,para usar los sistemas de soporte vital y el inodoro, y en 22 mil 500 dólares por día para todos los suministros necesarios que requiera la tripulación, a saber alimentos, aire, suministros médicos y etc.