Hace 15 años, Plutón perdió su categoría como el noveno planeta de nuestro sistema solar. Desde su descubrimiento en 1930, por parte del astrónomo estadounidense Clyde Tombaugh, se consideró como el último límite entre nuestro Sistema Solar y el resto del cosmos. Sin embargo, dadas sus dimensiones y características físicas, fue degradado a un planeta enano en agosto de 2006. Más de una década más tarde, podría ser que también esté perdiendo lentamente su atmósfera. Esto es lo que sabemos.
Un estudio reciente reveló que la capa de gases que protegen la atmósfera de Plutón se están desvaneciendo. Lenta e irremediablemente, el antiguo noveno planeta de nuestro Sistema Solar está perdiendo su recubrimiento natural, como consecuencia de su alejamiento progresivo del Sol.
Parece ser que, conforme se distancia de nuestro vecindario cósmico, la atmósfera una vez gaseosa de Plutón se está convirtiendo en partículas de hielo. Aunque los astrónomos ya sabían que esta capa era muy delgada, nunca se había visto un deterioro tan rápido, según la cobertura de Science Alert.
Conforme se adentra en la oscuridad del Cinturón De Kuiper, la región más gélida en las cercanías de nuestro Sistema Solar, la superficie del planeta enano se está congelando también. De acuerdo con el estudio publicado por Southwest Research Institute, el cuerpo celeste está pasando por un fenómeno inverso al cambio climático en la Tierra: en lugar de calentarse, se está volviendo un paraje completamente helado.
Adiós al cielo azul en Plutón
Una misión de la NASA en 2015 devolvió las imágenes más nítidas jamás vistas de Plutón. A partir de las fotografías de la Cámara de Imágenes Visibles Multiespectrales Ralph / New Horizons (MVIC), los astrónomos de la agencia determinaron que era muy posible que en el planeta enano hubiera cielos azules. Constituida de nitrógeno, con algo de metano y dióxido de carbono, al mirar hacia la bóveda celeste plutoniana se podría observar el mismo color de nuestro cielo en la Tierra.
Con la pérdida progresiva de la atmósfera de Plutón, sin embargo, este panorama cambiará radicalmente. En la actualidad, al planeta enano le toma 248 años darle una sola vuelta al Sol. Sin embargo, este tiempo está alargándose, conforme se aleja del Sistema Solar. En consecuencia, será mucho más difícil que reciba la energía de nuestra estrella principal —y por lo tanto, tendrá menos calor sobre la superficie.
Así, las montañas nevadas de Plutón se cubrirán cada vez más con capas de hielo perenne. De la misma manera, los cuerpos de agua que recubren algunas regiones de la corteza se convertirán para siempre en bloques congelados. Todavía no se sabe bien cuándo desaparecerá por completo la atmósfera de Plutón. Sin embargo, es una certeza de que, conforme continúe su recorrido galáctico, el planeta enano ya no contará con ese recubrimiento natural en el futuro.