En el marco de su proyecto bautizado como el Banco Mundial de Oreo, esta empresa construyó en Noruega un búnker de hormigón del Juicio Final para almacenar su dulce insignia.
Esta idea surgió después de que sus empleados leyesen el tuit de una fan de sus galletas en el que se preguntaba: "¿Quién salvará a las oreos?", en caso de que el cuerpo celeste conocido como 2018VP1 impacte contra la Tierra.
La instalación fue elevada sobre el permafrost, no muy lejos del Banco Mundial de Semillas de Svalbard, que contiene las semillas de miles de plantas de cultivo provenientes de todo el mundo y está destinado a preservar el legado botánico de la humanidad contra los desastres naturales y antropogénicos.
"Como precaución adicional, los envases de Oreo están envueltos en el tereftalato de polietileno, que puede resistir temperaturas de -60 a 150 grados centígrados y son insensibles a las reacciones químicas, la humedad y el aire, por lo que mantendrán las galletas frescas y protegidas durante años venideros", destacó la empresa en un comunicado, citado por el portal Cnet.
Pese a las preocupaciones de la tuitera, la NASA aseguró que el asteroide no representa ningún tipo de amenaza para la Tierra. Actualmente existe una probabilidad de 0,41% de que este cuerpo celeste ingrese en la atmósfera de nuestro planeta, pero si lo hiciera, se desintegraría debido a su tamaño extremadamente pequeño, destacó la Agencia en su cuenta en Twitter.