El pasado 29 de octubre, cinco astronautas que se encuentran en la Estación Espacial agregaron un poco de sabor a sus rutinarias dietas: comieron tacos con los primeros chiles cosechados en el espacio
Los astronautas de la NASA Mark Vande Hei y Shane Kimbrough, el astronauta de JAXA (Exploración Aeroespacial de Japón) Aki Hoshide y la astronauta de la NASA Megan McArthur a bordo de la Estación Espacial Internacional, así como el comandante de la Expedición 66, Thomas Pesquet, fueron los afortunados en probarlos.
Estos chiles han estado creciendo desde el 12 de julio, como parte de un experimento en Advanced Plant Habitat (APH), que es una instalación de crecimiento de plantas totalmente automatizada que se utiliza para realizar investigaciones de biociencia vegetal en la Estación Espacial Internacional.
El experimento, conocido como Plant Habitat-04, busca cultivar una variedad híbrida llamada Pimiento 'Española Mejorada' NuMex, que los investigadores seleccionaron porque los pimientos son una excelente fuente de vitamina C y se desempeñaron mejor en las pruebas de suelo en la APH.
Esta es la primera de las dos cosechas del experimento, y la segunda está prevista para finales de noviembre.
En comparación con los 10 productos espaciales anteriores que los astronautas de la NASA han cultivado y comido a bordo de la estación, el cultivo de chiles ha sido uno de los experimentos más desafiantes, según señala la NASA en un comunicado emitido.
Los chiles tienen tiempos de crecimiento más prolongados y, a diferencia de los rábanos o las verduras de hoja verde, requieren polinización antes de que se desarrollen los frutos.
Para superar esos desafíos, los investigadores de plantas en el terreno utilizaron más de 180 sensores y controles para monitorear de cerca los chiles y controlar con precisión el ambiente para condiciones óptimas de crecimiento.
Este experimento es parte de la investigación de la NASA sobre el cultivo de cultivos en el espacio, ya que las frutas y verduras pueden complementar la dieta de los astronautas con nutrientes clave como vitamina C y vitamina K, que los exploradores necesitarán durante misiones espaciales de larga duración en el futuro.
Algunos pimientos y sus hojas de la cosecha final regresarán a la Tierra para su posterior análisis.