En días pasados, el reconocido cantante británico Mick Jagger visitó el Museo Reina Sofía de Madrid. Todo transcurría con normalidad hasta que el líder de los Rolling Stones posteó en su cuenta de Twitter una serie de fotos, entre ellas una donde se le ve posando delante del icónico cuadro “Guernica”, de Pablo Picasso.
Inmediatamente, las autoridades del inmueble español tuvieron que salir a explicar por qué Jagger pudo fotografiarse en una sala en la que está prohibido el uso de cámaras, según sus propias normas.
“No está permitido hacer fotografías en toda la sala 206. Tampoco es posible que los visitantes realicen fotografías profesionales y/o privadas ajenas a la actividad museística ni grabar imágenes”, se lee en el reglamento oficial publicado por el Museo Reina.
En ese sentido, las autoridades del museo, a través del director Manuel Borja-Villel, sostuvieron que uno de los motivos para no permitir fotos delante de la pintura es el de “la calidad de la visita”.
Asimismo, aseguraron que la norma no se dictó para proteger el cuadro, sino para mejorar la comodidad de los visitantes, pues es muy poco probable que ésta resulte dañada por las cámaras sin flash.
“Es una cuestión de la calidad de la visita, porque la gente solía quedarse mucho tiempo tomando fotos e incluso golpeaban a otras personas con el palo de selfies”, señaló Borja Villel.
“El Museo Reina Sofía recibe millones de visitantes al año y por este motivo no perseguimos a todo el mundo que se quiere sacar una foto. Hay visitantes que también tienen su postal frente al `Guernica´ y en el 90% restante del museo donde sí están permitidas. Por lo anterior, intentaremos no darle demasiada importancia”, agregó.
Cabe recordar que esta no es la primera vez que se desata la polémica con un visitante famoso. En 2016, el actor irlandés Pierce Brosnan también se vio involucrado en una situación similar gracias a una foto compartida por el propio museo.
Debido a las múltiples quejas recibidas, el Reina Sofía hizo público un comunicado en su cuenta de Facebook, en el que pedía disculpas por el malestar de sus usuarios, explicando que dicha fotografía era “una acción de comunicación”, como muchas otras realizadas a lo largo de su historia.