- El Partido Revolucionario Institucional (PRI) no está muerto. Cierto es que la intención del voto lo ubica en el nivel más bajo de los últimos años, pero aún conserva la estructura y recursos del Gobierno estatal. Además, se mueve: desde hace algunas semanas, la dirigencia estatal realiza acercamientos hacia la militancia y liderazgos locales para unificarse, reestructurarse y reorganizarse. Si al final, todo eso llegara a fallar, su Plan “B” se llama Bloque Antimorena, y el “C”, Partido Verde Ecologista de México (PVEM).
- Desde hace semanas, el Edoméx permanece en semáforo naranja, y por momentos la situación de contagios de COVID-19 parece agravarse, aunque en otros se estabiliza y desciende. Sin embargo, lo que ha quedado de manifiesto es que la aplicación del semáforo de alerta ha sido un fracaso constante, pues hasta fiestas patronales se realizan ya en la capital mexiquense. El hecho es que resulta necesario que las autoridades implementen medidas más enérgicas para hacer entender a la población el riesgo que corren al realizar actividades como esas.
- A pesar de los constantes llamados por parte de personal médico y administrativo del hospital Mónica Pretelini, las acusaciones por la falta de protección para los trabajadores frente a la contingencia sanitaria continúan. Debido a la muerte por COVID-19 de un empleado del área administrativa, familiares acusan negligencia por parte de los directivos, ya que, a pesar de pertenecer a grupo vulnerable, la víctima no dejó de laborar, situación que lo llevó a contraer la enfermedad y, lamentablemente, a perder la vida.