Mientras el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) palomeó la estrategia de clases virtuales, líderes de su ala disidente, la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), la denostaron indicando que no es integral, no cuenta con el aval de maestros y sigue siendo excluyente.
El SNTE, dirigido por Alfonso Cepeda Salas, emitió un posicionamiento en el que ofrece al Estado su acompañamiento y respaldo para el programa Aprende en Casa 2, que se aplicará a partir del 24 de agosto, cuando inicie el ciclo escolar 2020-2021 y cuyas clases serán virtuales.
Señaló que existen coincidencias entre el Sindicato con el presidente Andrés Manuel López Obrador y con el secretario de Educación Pública, Esteban Moctezuma Barragán.
Destacó que los acuerdos con televisoras no tienen precedentes y que este modelo educativo permitirá continuar el aprendizaje. Asimismo, agradeció la expresión de respetar los salarios, prestaciones y basificaciones de los docentes.
Sin embargo, Aprende en Casa 2 fue criticado por parte de representantes del magisterio disidente.
En entrevista, Pedro Hernández, secretario general de la Sección 9 de la CNTE, remarcó que, contrario a los dichos del Gobierno, sí se está sustituyendo a los maestros, pues sólo algunos aparecerán en la televisión impartiendo clases: "La televisión es la gran educadora y los maestros sólo calificaremos lo que enseñe la televisión", apuntó.
Refirió que, si bien, los programas contarán con lenguaje de señas, algunos alumnos poseen otras discapacidades, como la dificultad para hablar, por lo que, dijo, se quedarán en el abandono, pues necesariamente requieren de la interacción con el profesor.
Tan sólo en la Ciudad de México, comentó, a través de una encuesta realizada por la CNTE, maestros reportaron que alrededor de 15% de sus alumnos dejó de reportarse y, por ende, de continuar sus procesos educativos.
Hernández señaló que el abandono y rezago escolar son dos de las grandes preocupaciones del magisterio, por lo que reprochó que los docentes no hayan sido consultados al respecto.
En tanto, la Sección 22 de la CNTE, perteneciente a Oaxaca, comunicó su rechazo a este modelo educativo: "La Sección 22 de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación rechaza, tanto el modelo híbrido educativo, como la educación de una educación a distancia a través del monopolio televisivo, porque no existen en nuestro estado las condiciones técnicas, físicas y orográficas que contribuyan a la recepción de contenidos educativos en las comunidades marginadas, donde contar con un televisor se traduce en un privilegio que queda desfasado cuando la niñez tiene que acoplarse al trabajo de campo y en familia para sobrevivir durante esta pandemia".