Varios miles de personas recibieron dosis de agua salina en vez de la vacuna contra la COVID-19 en varios centros fraudulentos de vacunación en el estado occidental indio de Maharashtra, informaron este martes las autoridades.
Unas 2 mil 500 personas «en lugar de la vacuna Covishield (la versión india del antígeno desarrollado por AstraZeneca), recibieron agua salina» en varios puntos de la ciudad de Bombay durante los meses de mayo y junio, dijo el comisionado adjunto de la policía de la localidad, Vishal Thakur.
Hasta el momento hay 14 detenidos acusados de este fraude, entre los que se incluyen varios médicos y trabajadores sanitarios que «de alguna manera, pertenecen al campo de la medicina», precisó.
Eventos similares de supuesta vacunación fraudulenta han sido reportados en otras regiones del país en los últimos dos meses, coincidiendo con el periodo en el que el Gobierno indio autorizó la vacunación de toda la población adulta, ampliando al máximo los grupos de edades permitidos.
Aunque la vacunación en la India se hace actualmente de manera gratuita, la política pública inicial establecía que el Estado cubriría solo las dosis de mayores de 45 años, y por tanto el resto de la población debía asumir el coste de su propio bolsillo.
Supuestos «campos de vacunación de covid organizados por personal no autorizado» fueron detectados en la ciudad de Calcuta del estado de Bengala, según una carta del secretario de Salud indio, Rajesh Bhushan, dirigida al gobierno de la región en la que pidió su investigación.
El llamado de Bhushan surgió después de que la policía recibiera denuncias sobre al menos dos centros de vacunación no autorizados en Calcula, en los que se estaban suministrando antibióticos en vez de dosis contra el coronavirus.
El suceso hizo que cientos de manifestantes saliesen ayer a las calles de la capital bengalí para protestar contra la supuesta responsabilidad del gobierno local en el fraude.