El presidente de Francia, Emmanuel Macron, anunció este jueves un plan energético para los próximos años que incluye un vasto programa de inversión en producción eólica y nuclear, con hasta 14 nuevos reactores, y una reducción del 40% del consumo de energía. El país espera lograr la neutralidad de carbono en el año 2050 y dejar atrás las energías fósiles.
"Necesitamos retomar el hilo de la gran aventura de la energía nuclear civil en Francia", junto al impulso de las energías renovables, para cubrir las futuras necesidades crecientes de electricidad, dijo el mandatario.
Su plan pasa por encargar al gigante energético francés EDF, de mayoría estatal, la construcción de seis reactores para 2050 y estudiar la posibilidad de ocho adicionales, así como prolongar la vida del mayor número posible de reactores en funcionamiento.
Este anuncio busca conjugar el plan de reindustrialización anunciado en noviembre pasado (Francia 2030) y el compromiso de alcanzar la neutralidad de carbono en 2050, en el marco de la lucha contra el cambio climático.
A ocho semanas de la primera vuelta de las presidenciales, para las que todavía no es candidato oficial, Macron se situó en una posición diferente al resto de los candidatos. Mientras que la derecha y la extrema derecha apuesta por la energía nuclear y rechaza las eólicas, la izquierda pide el cierre de la atómica para desarrollar las renovables.