La Administración de Drogas y Alimentos (FDA) de Estados Unidos autorizó la primera prueba casera capaz de distinguir entre la gripe común y COVID-19, con el propósito de disminuir el número de falsos casos del nuevo coronavirus, debido a que los primeros síntomas de la infección son fácilmente confundidos con los de un resfriado ordinario.
La nueva prueba casera creada por la agencia Quest Diagnostics ofrece una forma segura y conveniente para que las personas, especialmente aquellas con alto riesgo de contraer el COVID-19, se realicen la prueba en casa y eviten la exposición a la nueva enfermedad al asistir a un hospital.
“Con la autorización de esta prueba, la FDA está ayudando a abordar la lucha en curso contra el COVID-19 mientras se encuentra en medio de la temporada de gripe, que es importante para muchos, incluidos los estadounidenses más vulnerables”, señaló el doctor Stephen M. Hahn, comisionado de la Agencia.
Asimismo, explicó que la prueba permitirá a los pacientes continuar en cuarentena mientras esperan los resultados, y añadió que: “Esta eficacia puede contribuir en gran medida a brindar información oportuna a los enfermos con una enfermedad respiratoria desconocida”.
Cabe mencionar que la FDA advirtió que la prueba puede producir resultados negativos si la muestra no es recolectada correctamente.