Cada año, la Nochebuena reúne a las familias y amigos en torno a la mesa. Por eso, la cena de Navidad es una gran oportunidad para demostrar nuestras dotes culinarias y sorprender a nuestros seres más queridos.
Pero eso no es todo, pues ya que se trata de una noche especial, cuando organizamos la cena de Navidad, buscamos que todo quede perfecto, que no falte ni un solo detalle. Si quieres que tu cena de Navidad sea un gran éxito, vamos a compartirte una serie de claves fundamentales.
Primero, tenemos que asegurarnos de seleccionar el lugar adecuado. Debe ser un espacio amplio para que en él entren todos tus invitados sin sentirse apretujados; tener el número de asientos suficientes para que nadie se quede de pie y estén cómodamente sentados; cálido, pues no olvidemos que nos encontramos en temporada invernal y afuera hará mucho frío; y ventilado, ya que no queremos abochornarnos con el calor producido, tanto por nuestros cuerpos, como por el de la preparación de los alimentos.
La decoración es otra de las partes más importantes de la cena. Normalmente estamos acostumbrados a ver muchas luces y gran variedad de adornos de toda clase (santas, renos, botas o calcetas, muñecos de nieve), pero de lo único que no debemos olvidarnos es que el árbol de Navidad debe tener un apartado especial.
Una buena selección musical convertirá tu cena en un festival de sensaciones, llegando, incluso, a influir en la percepción que tenemos de los sabores de nuestros alimentos; y entre más variedad haya en nuestra lista de reproducción, tanto mejor. Un buen apartado de villancicos y canciones navideñas nunca estará de más.
Y por supuesto, la elección del menú. No hace falta optar por uno muy elaborado, basta con encontrar el equilibrio entre precio, calidad y sabor.
