Tres Pm

La Legislatura local urgió a la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) a realizar un estudio técnico para conocer el impacto ambiental, económico y social en el Nevado de Toluca, derivado de su recategorización, en 2013, de Parque Nacional a Área de Protección de Flora y Fauna.
El exhorto además apela al titular de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas para que informe a la brevedad los resultados del programa de manejo en la zona.
El diputado morenista Margarito González, promotor del punto de acuerdo avalado de urgente resolución, recordó, que el decreto presidencial de recategorización, promulgado el primero de octubre de 2013 se basó en el pretexto de permitir a las comunidades el aprovechamiento sustentable de los recursos maderables.
Lo anterior, advirtió, colocó en situación de vulnerabilidad la vocación natural del lugar, pues: “casi nada se hizo por aislar la zona, resguardarla de toda la dinámica humana y protegerla de la explotación de sus recursos naturales”.
“No ha existido ninguna política o estrategia ecológica que permita su conservación. En la actualidad, dicha zona se encuentra invadida por la actividad humana, como muchas de las áreas naturales protegidas en el país”, denunció.
Adicionalmente, expuso, que el 21 de octubre de 2016 la Semarnat presentó el nuevo Plan de Manejo del área natural protegida del Nevado de Toluca, con lo que autoriza la tala comercial de 17 mil hectáreas de bosque, lo que equivale a 33% del territorio de esta reserva natural y es donde se asienta casi la totalidad de la masa forestal del Nevado.
Si la recategorización no se maneja adecuadamente, alertó, en lugar de frenar el deterioro del Nevado puede incrementarse la extracción de recursos forestales, incluso de forma legal, y facilitarse el crecimiento de las zonas agrícolas, urbanas y los asentamientos humanos, pues las áreas de protección de flora y fauna tienen menos restricciones en el manejo de los recursos naturales y en el uso del suelo que los parques nacionales.
Otra preocupación, manifestó, es que las plantaciones forestales pueden ser con especies comerciales, y de esta manera se pierde el valor biológico del Nevado.
Por estas razones, González Morales consideró necesario que la Semarnat revise ambas decisiones a fin de evitar que se siga talando la zona.