El sector empresarial del Estado de México continúa trabajando en conjunto con las autoridades para evitar la aprobación en la entidad de una ley que prohíba la venta de alimentos con altos contenidos calóricos, “comida chatarra“, a menores de edad, pues argumentan que esto no ejercería un impacto sobre la salud, pero si desencadenaría otras problemáticas.
En México, 59% de la economía se encuentra en el mercado informal, por lo que una ley como la aprobada en otras entidades provocaría la venta ambulante, competencia desleal y extorsión en la materia, consideró Gilberto Sauza Martínez, presidente del Consejo de Cámaras y Asociaciones Empresariales del Estado de México (Concaem).
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“Debemos analizar si hacer la prohibición de la venta de este tipo de alimentos en realidad va a impactar en su consumo”, dijo, coincidiendo con otras voces en la realización de campañas de concientización y acciones preventivas, y no satanizar a la industria.
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“Queremos políticas públicas que de verdad abonen a la salud de las personas a través de la educación en materia de alimentación y programas de activación física. El tema no es que dejen de consumir pastelitos, sino que se haga en una proporción adecuada”, expresó.
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Enfatizó que, durante las mesas de trabajo emprendidas con coordinadores de las fracciones políticas, se ha determinado corresponsabilidad en el tema, donde las autoridades pueden ejercer sus facultades en materia de salud, y las empresas estar dispuestas a participar; cuestión en la que, dijo, se ha avanzado.
“Es el caso del grupo Bimbo, donde algunos de sus productos quedarán fuera de la estrategia del proyecto del nuevo etiquetado, debido a las medidas tomadas para su elaboración“, dijo. Además, con dichas acciones se afectarían miles de empleos; como ejemplo, tan sólo en el Valle de Toluca, grupo Bimbo cuenta con 4 856 trabajadores.