Durante tres horas y media, la carretera Toluca-Atlacomulco se convirtió en uno de los 26 puntos a nivel nacional que la Confederación Nacional de Industriales de Metales y Recicladores (CONIMER) bloqueó para exigir que se eche atrás la propuesta del Partido Verde con la que aseguran se privatizarán los centros de reciclaje.
Alrededor de las 9:30 de la mañana, con piedras, camionetas y palos, alrededor de 400 recicladores provenientes en su mayoría de Toluca e Ixtlahuaca, bloquearon la carretera Toluca-Atlacomulco a la altura del kilómetro 10+900, así como el distribuidor vial Bicentenario que conduce a Zitácuaro, Lerma y Valle de Bravo.
El cierre repentino, adelantado ya que estaba pactado a las 10 de la mañana, provocó conatos de bronca con los automovilistas, sin embargo, los recicladores no cambiaron de posición y solo permitieron el paso de vehículos con personas enfermas abordo.
“Entendemos que esto causa afectaciones pero por eso lo hacemos, si hay otra forma de que el gobierno federal nos haga caso, que nos la digan, la gente no ve que si se privatiza reciclaje más de 6 millones de familias nos vamos a quedar sin sustento, somos millones porque cada uno de nosotros tiene cinco o seis empleados, eso es lo que no ven con sus propuestas”, reclamaron.
Ésta es la segunda protesta por la propuesta del Partido Verde Ecologista de México, en el Congreso de la Unión, para modificar los artículos 9, 10 y 96 de la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de Residuos que, afirman, permitiría generar contratos desfavorables para ellos, el cobro de impuestos y la privatización del manejo de los desechos industriales.
“No somos delincuentes, nosotros vivimos de lo que otros considera basura, pero esta ley también va a afectar a otros como a los mecánicos que también nos venden los desperdicios”.
Los manifestantes acusaron que de aprobarse esta reforma afectaría a seis millones de personas con empleos directos, más 14 millones de indirectos.