La economía de los mexiquenses se ve cada día más mermada debido al COVID-19, ya que una vez que contraen el virus, los gastos son excesivos para quienes no cuentan con Seguridad Social.
Tal es el caso de Ángel, quien en 14 días gasto un total de 19 mil 390 pesos, cantidad que no supo de donde sacó dado que durante este tiempo solo percibió el 60 por ciento de su sueldo. “Entre el guardadito de mi mamá, de mis hermanos, lo que me quedaba en la tarjeta, fue como sobreviví, porque es eso sobreviví a la contingencia , al virus y sobre todo a la mala economía por la que atravesamos todos quienes nos enfrentamos a la enfermedad”, señaló el mexiquense.
Al inicio de la enfermedad, Ángel comenzó con un gasto de 1,500 con la prueba de PCR. Posteriormente, pagaron 2,800 por las consultas a domicilio del médico particular: “Tuvimos que buscar médico particular, porque como te comenté no tenemos Seguridad Social y no nos quedo de otra más que pagar para que me atendieran, de otra manera el resultado hubiera sido otro”.
Refirió que, por los medicamentos tuvo que pagar dos mil 500 pesos, más cuatro mil pesos de la renta del oxígeno que utilizó por 10 días.
“El oxígeno lo ocupe por 10 días, pero aún así pagamos los cuatro mil por el mes, para algunas familias es vital tener los tanques, de otra manera no podemos sobrevivir”, dijo.
Una vez que Ángel fue dado de alta, la indicación del médico fue realizar otra tomografía de tórax para revisar las secuelas que dejo el paso del COVID en su cuerpo, la cual tuvo un precio de 3,400 pesos, a este precio se suma la consulta con el neumólogo de 900 pesos, más un espirómetro para la rehabilitación de 250 pesos. Por el momento, sólo continúa tomando un medicamento llamado montelukast, el cual sirve para evitar espasmos al respirar y tiene un costo de 240 pesos.
A toda esta lista, Ángel agrega los gastos de alimentos, mismos que fueron solicitados a través de servicio de comida corrida, así pues durante un mes la suma llegó a 3,800 pesos.