Los talleres textiles de Calimaya, Santa Cruz Atizapán y Almoloya del Río maquilaron uniformes deportivos y de gala para obtener buenas ventas con las clases cien por ciento presenciales.
Sin embargo, los textileros de la zona informaron que las expectativas de venta aún no son las proyectadas, por lo que prevén que con la elaboración de trajes típicos puedan llegar a un 70 por ciento en ventas.
De acuerdo con los fabricantes señalaron que aún falta uniformes por vender que se encuentran almacenados desde el inicio de la pandemia, por lo que es material que no se echa perder, si es venta estancada.
Asimismo indicaron que otro factor que ha golpeado a la industria es el aumento del 30 y 40 por ciento en el precio de las telas, sobre todo en los meses que para ellos es de buenas ventas, tales como julio, agosto y septiembre.
Además señalaron que el sector tiende a incrementar los precios de manera anual y muchos de los padres de familia optan por el trueque o la reventa de uniformes de segunda mano, lo cual complica también las ventas de uniformes nuevos.