La detención de un ex alcalde morenista por el supuesto reparto de propaganda, la presunta presencia de agitadores de otras entidades y el jaqueo de teléfonos del equipo de Morena para evitar su comunicación, son parte de los incidentes que han marcado la primera parte de la elección de gobernadora en el Estado de México.
Ricardo Núñez, ex alcalde de Cuautitlán Izcalli, fue remitido a la Fiscalía Regional de Cuautitlán de la Fiscalía mexiquense (FGJEM) por la presunta distribución de propaganda de la morenista Delfina Gómez.
Él y un acompañante identificado como Conrado Flores Hernández son acusados por presuntamente infringir el artículo 7, fracción III, de la Ley General en materia de Delitos Electorales que establece que incurre en una violación “quien haga proselitismo o presione objetivamente a los electores el día de la jornada electoral”.
Ambos fueron asegurados en calle Río Córdoba esquina con calle Emisor Poniente, colonia Tecuac, municipio de Cuautitlán, cuando estacionaban un vehículo Volkswagen, tipo Jetta, color gris, año 2021, con placas de circulación PDF8149 del Estado de México, con la cajuela abierta.
Conforme a los primeros respondientes, los investigados realizaban proselitismo, pues repartían periódicos y propaganda con la imagen de la candidata del partido político Morena. En los anuncios, se lee: “Este 04 de Junio Vota por Delfina Gómez”, aunque las personas a las que se les repartieron no quisieron presentarse a denunciar.
En tanto, Alejandro Ozuna, coordinador de campaña de Alejandra del Moral, denunció, a través de redes sociales, que su partido detectó “la presencia de grupos organizados provenientes de otros Estados y de la CDMX cuyo objeto es enrarecer el clima de civilidad que debe prevalecer en la contienda electoral”.
Por tanto, llamó “a todos los partidos en especial a Morena para conducirnos con responsabilidad”.
Por su parte, el diputado local Max Correa denunció que a partir de las 6:00 de la mañana de este domingo son víctimas del hackeo de los teléfonos celulares de varios representantes populares y miembros del equipo de trabajo de Morena, con “el objetivo de mantener incomunicados a los líderes e incluso con los representantes de casilla del partido”, advirtió.
Explicó que, de manera ininterrumpida, entran llamadas a sus dispositivos móviles, tanto de números conocidos como desconocidos, pero nadie contesta; y no pararon las llamadas hasta cerca de las 9 de la mañana.
Manifestó que la única forma en la que se pueden comunicar es utilizando el wifi de inmuebles particulares y poniendo en modo de avión los celulares, “porque cuando nos conectamos a los datos del celular, de inmediato empiezan las llamadas en cascada y deja de funcionar la conexión en línea”.
Al intentar denunciar ante la Fiscalía Especializada para la Atención de los Delitos Electorales, indicó que la persona que contestó le aseguró que la conducta no es su competencia porque se trata de comicios locales, a pesar de que el problema de telefonía es de carácter federal.
“Está clara la impunidad y esta es una de las nuevas formas de lo que saben hacer, para bien o para mal, los que quieren obtener constancia de mayoría a toda costa, sin importarles ir en contra de los deseos democráticos de los ciudadanos mexiquenses”, señaló.
Finalmente, Joaquín Rubio Sánchez, presidente de la Junta Local del Instituto Nacional Electoral (INE) en el Estado de México, afirmó que “es técnica y humanamente imposible un fraude”, tras indicar que la jornada para elegir gobernadora será de las más vigiladas.