El cierre en el que se encuentra el sector productivo en el Estado de México, debido al semáforo de riesgo epidemiológico por COVID-19 en rojo, podría desencadenar problemas sociales por la falta de ingresos al que ya se enfrentan miles de personas, así lo advirtió Gilberto Javier Sauza Martínez, presidente del Consejo de Cámaras y Asociaciones Empresariales del Estado de México (CONCAEM).
Puntualizó que, el sector productivo ha llegado a un punto de quiebre, en el cual “el siguiente paso es la descomposición social, el incremento en el índice de delitos y la operación irregular de los negocios, que podría repercutir en serios problemas de convivencia social y en problemas económicos permanentes para la entidad”, señaló.
Además, precisó que han cerrado definitivamente al rededor del 30 por ciento de negocios de giros como el restaurantero, hotelero, turístico, la prestación de servicios de eventos sociales, comerciantes, capacitadores, escuelas, centros comerciales, fabricantes de ropa, calzado y juguetes, que han sido de los más afectados, y agregó que las condiciones podrían agravarse.
Destacó que, al momento, el gremio formal ha sido respetuoso de la normativa y no llamará a la desobediencia o a operar de manera clandestina, pero si necesitan que se defina una nueva estrategia, en la que se les permita la apertura limitada de las actividades económicas, “en aras de no afectar más el medio de vida de millones de mexiquenses”, dijo.
Asimismo, mencionó que, para disminuir el número de contagios, lo cual no se ha dado pese a la declaratoria del semáforo rojo y el cierre de empresas y comercios, es necesaria la decisión consciente y personal de los ciudadanos, por lo que hizo un llamado a las autoridades para considerar la reactivación económica.
Enfatizó que, la estrategia actual no está funcionando y únicamente se está afectando la economía, “el cierre por completo de unidades económicas, como parte del confinamiento, ya no es efectivo, ya que la población en realidad no está permaneciendo en sus hogares; tenemos 22 días en este semáforo rojo y los índices no han bajado, por el contrario”, manifestó Sauza Martínez.