En una mesa rodeado de flores blancas y veladoras permanece el retrato de Miguel Ángel Martínez, una de las tantas víctimas de la negligencia de los operadores del transporte público colectivo.
El pasado miércoles 13 de octubre fue arrollado por un camión, lo que le provocó la muerte de manera inmediata, y a más de ocho días del incidente su familia no ha tenido avances en la investigación.
"No fue a un animal al que mató, no se vale que hagan eso, ya que con el dinero que dan las empresas no van a revivir a la gente, pues dejan dolor a toda su familia, no nada más a mí", externa María de Lourdes Gómez, esposa de Miguel Ángel.
Miguel era trabajador del área de Servicios Públicos del Ayuntamiento de Toluca. Todos los días salía en compañía de su bicicleta para trasladarse a su zona de trabajo.
"Era el sustento de mi hijo y yo, salía desde las siete de la mañana de aquí de su casa, en todo este tramo no hay altos o espacios para ellos los ciclistas", explica.
En el cruce de avenida las Torres y Eduardo Monroy existen cámaras de videovigilancia, por lo que la familia de Miguel Ángel confía en que las autoridades puedan dar con el responsable una vez que se pueda ver la grabación.
"Nos dijeron que según del otro lado sí están las cámaras, esperamos que con esto se dé con el responsable, porque no se vale que ande haciendo eso", detalla.
La familia exige que el responsable sea detenido y que les sea retirada la concesión a la empresa para la que presta servicio el operador.
"Él tenía 23 años ya trabajando en el área de Parques y Jardines, estaba muy contento porque apenas cumplió todo ese tiempo, él andaba siempre en su bicicleta y nunca le había pasado nada hasta ese día", señala.
El señor Miguel, cumpliría 53 años, el próximo mes pensaba reunirse con su familia, sin embargo, este deseo quedará sin cumplir.
"No me lo van a revivir con que hagan algo, pero que no se quede así, yo se que ya no va a venir, ya se fue, pero que no se quede así", concluye.