A un año de no poder visitar la tumba de quién les dió la vida, cientos de mexiquenses llegaron a los principales panteones con flores, música y lágrimas en los ojos, y es que el reencontrarse con el lugar donde descansan sus restos fue lo mejor.
"Me emociona, sé que no la voy a ver físicamente pero estar cerca de su tumba me alivia el alma, vengo a dejarle sus rosas que tanto le gustaban y a ponerle su música, la pandemia nos ha dejado muchas cosas feas, pero también hemos sabido salir adelante y por eso es que estamos aquí", comenta la señora Rosa Delia.
Los panteones municipales abrieron sus puertas durante tres días, con la finalidad de que las personas colocaran una flor en la tumba de su madre, tan solo ayer (domingo) en el panteón municipal y general de Toluca arribaron más de tres mil personas.
"Pensamos que iba a ver mucha gente, pero no, está tranquilo, vamos aprovechar para entrar rápido y salir, lo principal ya está una flor para mi mamá y su coquita, la dejamos en su tumba le rezamos, le ponemos su ofrenda y nos vamos", comentó Lidia.
En cada campo santo, se instalaron filtros sanitarios donde a los asistentes se les tomó la temperatura y se les dio gel antibacterial, cabe destacar que no se permitió la entrada a menores de edad.