La temporada vacacional de Semana Santa representa un repunte de hasta 80 por ciento en la ocupación hotelera en los municipios con vocación turística, es por ello que la Coordinación de Regulación Sanitaria y Comisión para la Protección contra los Riesgos Sanitarios, pondrá bajo la lupa a estos inmuebles y a las 230 albercas que existen en el Estado de México.
Lo anterior con la finalidad de evitar que los turistas tengan que lidiar con cucarachas, hormigas, ratas, moscas, pulgas, piojos e incluso fluidos corporales.
Son los municipios de Valle de Bravo, Ixtapan de la Sal, Tonatico, Malinalco, Tenancingo, Tejupilco, además de Ecatepec, Tlalnepantla, Cuautitlán Izcalli, Nezahualcóyotl, Teotihuacán y Zumpango en los que la Coprisem se enfocará debido a que ahí la gente decide vacacionar durante este periodo.
Santiago Ramos Millán Pineda, titular de esta dependencia, detalló que a la par, también se estarán revisando las condiciones en las que operan los restaurantes en los que se venden mariscos.
“Tomamos estas muestras para determinar si el cloro se encuentra dentro del rango permitido y el PH. Aquí la recomendación sería que los usuarios verifiquen que haya regaderas para antes y después de hacer uso de las albercas, vigilar que haya un salvavidas, que haya sanitarios y en general que observen las condiciones higiénico-sanitarias”.
Adicionalmente se realizarán este tipo de inspecciones en hoteles, donde se aplicarán medidas preventivas como pláticas y asesorías en materia sanitaria, para prevenir que existan irregularidades en el servicio o las condiciones higiénicas.