Han pasado más de 30 años desde que se avistó a un delfín con “pulgares”, el cual desarrolló tan singular rasgo desde el útero de su madre. Ahora, un ejemplar bastante parecido ha sido fotografiado en el Golfo de Corinto, Grecia.
De acuerdo con investigadores del Instituto de Investigación de Cetáceos Pelagos, encargados del hallazgo, esta característica no representa ninguna dificultad para el nado del delfín, pues éste fue visto saltando y jugando junto a otros ejemplares.
En ese sentido, Alexandros Frantzis, líder del equipo, aseguró que los “pulgares” del cetáceo tampoco son resultado de alguna enfermedad en particular.
“Esta formación en las aletas parece más bien la expresión de algunos genes raros e irregulares, los cuales surgieron debido al constante mestizaje entre delfines”, indicó el científico para la revista Live Science.
“Nos resulta muy grato observar que este extraordinario delfín esté prosperando y llevando una vida normal, a pesar de poseer una característica que, podría pensarse, dificultaría su ciclo vital”, concluyó.