Un equipo del Imperial College de Londres, Inglaterra, acaba de revelar que el comportamiento homosexual en monos macacos es bastante común e incluso hereditario.
Para llegar a esta llamativa conclusión, los científicos tuvieron que observar a una colonia salvaje de primates por tres años.
Los resultados del estudio, publicado en la revista Nature Ecology and Evolution, sugieren que estas conductas podrían ser resultado de la evolución y una característica recurrente de la reproducción de estos animales.
“Con base en observaciones y datos genéticos, creemos que el comportamiento homosexual entre machos de la misma especie es algo raro en animales no humanos, que se da sólo cuando existen condiciones inusuales”, señaló Jackson Clive, coautor del artículo.
“Sin embargo, nuestro trabajo demuestra que la mayoría de macacos machos se comportan de forma bisexual, y que la variación en dicha actividad del mismo sexo es hereditaria”, añadió.
En ese sentido, el experto asegura que lo anterior signifca que el comportamiento puede contar con una base evolutiva y que los machos que copulaban entre sí resultaban más propensos a apoyarse en los conflictos, es decir, las parejas de macacacos que practican el sexo regularmente obtienen una ventaja sobre el resto del grupo.
Pero eso no es todo, pues los ejemplares involucrados son capaces de tener más éxito en la reproducción, gracias a los beneficios de tener más “alianzas”.
“Por desgracia, hoy día algunas personas siguen creyendo que el comportamiento homosexual es antinatural, sin saber que éste se encuentra muy extendido entre los animales no humanos”, comentó el líder de la investigación, Vincent Savolainen.
“Ahora, nuestro deber es avanzar en la comprensión científica de la conduca entre dos seres del mismo sexo, y explorar los beneficios que aporta tanto a la naturaleza como a las sociedades animales”, concluyó.