Un nuevo estudio elaborado por la plataforma Global Forest Watch, en colaboración con la Universidad de Maryland (Estados Unidos), reveló que el año pasado el país que más destruyó bosques tropicales fue Brasil, con alrededor de 530 mil hectáreas devastadas.
A este país sudamericano, detalló, le sigue la República Democrática del Congo; Bolivia; Indonesia; Perú; Laos; Camerún; y Madagascar.
Sin embargo, analizando una serie de imágenes satelitales, los investigadores encontraron que la deforestación de los bosques tropicales primarios a nivel mundial se redujo un 7.3% en los últimos doce meses: de 4.1 millones de hectáreas en 2022 a 3.8 millones de hectáreas en 2023.
Por si fuera poco, Brasil, el primer lugar de la lista, logró disminuir el área deforestada en un 36%: de 1.77 millones de hectáreas en 2022 a 1.14 millones de hectáreas en 2023, registrando así su nivel más bajo desde 2015.
No obstante, la plataforma advirtió que pese a los datos antes mencionados, el nivel de deforestación aún se mantiene elevado, amenzando el cumplimiento de la meta con la que 145 países se comprometieron en la COP26 de 2021, en Glasgow, de reducir a cero la destrucción de estos ecosistemas para 2030.