A finales de septiembre pasado, en este espacio te contamos la historia de “Kroshik” (“Migajas”, por su traducción al español), un gatito de 17 kilogramos que había sido rescatado del sótano de un hospital ruso.
Luego de ser encontrado por miembros del Refugio Matroskin, el minino comenzó con un proceso de rehabilitación, pues desde hace varios años sufría las graves consecuencias de la sobrealimentación, debido a que sus dueños solían darle grandes cantidades de sopa, carne y galletas.
Sin embargo, pese a los esfuerzos para recuperar su salud, en las últimas horas se reportó la muerte de “Kroshik”, también conocido como “Crumbs”.
Vía redes sociales, los encargados de supervisar al felino explicaron que éste se enfermó de repente y el sábado 26 de octubre su vida terminó tras un inevitable ahogamiento.
Una vez analizado el cuerpo de “Kroshik”, investigaciones preliminares realizadas por médicos veterinarios del Refugio Matroskin descubrieron “múltiples crecimientos” en el brazo del animal, los cuales hicieron metástasis a otros órganos internos.
Pese a lo anterior, los restos serán enviados para ser examinados a mayor detalle y así se puede determinar con exactitud la causa de muerte. En tanto, las cenizas serán esparcidas en un lugar no revelado.