Debido a la emergencia sanitaria provocada por el nuevo coronavirus, causante de COVID-19, un gran número de personas debieron permanecer en sus casas durante mucho más tiempo del habitual, ya fuera trabajando, conviviendo con sus familias o pasando largos periodos de tiempo en compañía de sus mascotas.
Sin embargo, estamos entrando en la etapa llamada “Nueva Normalidad”, en la que se comienzan a reiniciar las actividades habituales de manera escalonada.
No obstante, esta reincorporación podría llegar a ocasionar algunos problemas de comportamiento en perros y gatos, debido, principalmente, a que nosotros, como dueños, regresaremos a nuestras rutinas diarias, lo que significa que las mascotas volverán a pasar más tiempo solas.
“Esta transición podría generar en ellos ansiedad por separación, frustración, miedo o aburrimiento” advierte Alejandro Sánchez Pacheco, especialista en animales de compañía por parte de MSD Salud Animal de México.
Sánchez Pacheco recomienda a todos los dueños estar al pendiente de posibles señales y signos de ansiedad, tales como jadeos constantes, cambios en los patrones de alimentación, falta de sueño, destrucción de objetos en el hogar u orinar y defecar en lugares poco comunes. Lo anterior, en el caso de los perros; los gatos podrían mostrar otro tipo de signos, como aislamiento y comportamiento de caza.
Consejos prácticos
Para reducir los efectos negativos y minimizar la alteración de sus rutinas, será necesario “reeducar” a nuestras mascotas, de modo que el cambio sea progresivo y lo menos radical posible.
“Un ejercicio muy sencillo consiste en simular todo lo que acostumbramos hacer antes de salir de casa y quedarnos en la puerta durante unos segundos. Paulatinamente, deberemos repetir la rutina por unos cuantos días consecutivos y, poco a poco, aumentar el tiempo fuera de casa. De esta manera, la alteración en el comportamiento de nuestras mascotas se minimizará”, señala el especialista.
Por otra parte, Sánchez Pacheco recomienda permitir que las mascotas tengan acceso a espacios desde los cuales puedan ver hacia la calle, personas u otros animales, siempre y cuando se trate de espacios seguros.
Finalmente, el especialista aconseja iniciar con estas actividades lo antes posible, ya que el grado de aceptación de cada animal de compañía dependerá de factores como la relación con su familia y el medio en donde viven.