Panamá se está consolidando como el “líder azul” mundial gracias a que el 30.52% de su superficie marina se encuentra protegida, destacó el director nacional de Costas y Mares del Ministerio de Ambiente, José Julio Casas.
Lo anterior forma parte del compromiso panameño con la Alianza 30x30, que promueve la protección de al menos un 30% de las aguas territoriales de los países participantes antes de 2030, a fin de mitigar el impacto del cambio climático y la pérdida de biodiversidad.
Para lograrlo, explica Casas, fue fundamental poner en marcha iniciativas duraderas. Tal es el caso de la declaración del Refugio de Vida Silvestre de la Isla Iguana como la primer área marina protegida en el año 1981.
La amplia riqueza de esta zona litoral, con arrecifes rocosos utilizados por especies de peces comerciales y la presencia constante de ballenas jorobadas (Megaptera novaeangliae), llevaron a las autoridades a considerar su ampliación.
Con el paso de los años, el Refugio de Vida Silvestre de la Isla Iguana pasó de tener 148 mil hectáreas a 650 mil, en las que diariamente se involucran pescadores, ONG y grupos conservacionistas locales.
“Con este tipo de medidas se demuestra el fuerte compromiso de Panamá con la protección y conservación de los océanos, así como con el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, consolidándose así como un indiscutible `líder azul´ a nivel mundial”, concluyó el dirigente.