Actualmente, un 59.58% del territorio argentino está afectado por distintos grados de sequía, reveló este martes el Sistema de Información sobre Sequías para el Sur de Sudamérica (Sissa).
Según el informe, este fenómeno es el más severo de los últimos 60 años al golpear a la producción agropecuaria del país, así como a la economía con caídas en las exportaciones y menores ingresos para el fisco.
Por si fuera poco, el Sissa descubrió que la sequía está lejos de terminar, toda vez que desde el pasado 20 de febrero ha afectado poco más de un millón 12 mil 570 kilómetros cuadrados al norte de la Patagonia.
“Hoy más que nunca, las sequías representan un desafío social, ambiental, económico e institucional”, recuerda el documento.
“En el futuro, estos eventos serán sustancialmente más cálidos que los pasados, y este calentamiento impulsará los aumentos proyectados en el riesgo y la gravedad de las megasequías en muchas regiones, incluido el oeste de América del Norte; América Central; Europa y el Mediterráneo; y la zona extratropical de América del Sur y Australia”, advirtió.