Si subirte a un avión te causa ansiedad o te angustias cada vez que viajas o simplemente necesitas desahogar un poco del estrés cotidiano en esta enorme y complicada ciudad, la solución es fácil y hermosa: puedes acariciar perros en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) antes de dirigirte hacia el avión que te llevará a tus vacaciones —o el destino que te espere. Awww, nada más bello que un poco de amor perruno en un momento estresante.
Cómo acariciar perros en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México
Busca a Harley, un perrito de confort que andará rondando los pasillos ambulatorios y la sala de última espera de las terminales 1 y 2 del AICM para confortar a todo el que necesite desestresarse. Estará todos los Días Santos, del 18 al 21 de abril de 12:00 a 17:00. Lo reconocerás porque traerá un chaleco rojo con el logo de “Perros de Confort”, al igual que su cuidadora o cuidador que lo acompaña. Esta iniciativa es parte del primer programa Perros de Confort del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica).
La historia de Harley
Antes de ser parte de este programa de acariciar perros en el aeropuerto, Harley fue un perro de la calle pero fue rescatado por un centro de adopción y después fue entrenado por el Centro Nacional de Adiestramiento y Desarrollo de la Unidad Canina (CENADUC) para convertirse en perro inspector. Estos ayudan a detectar productos agroalimentarios en los equipajes de los viajeros, con el fin de evitar la introducción de algún alimento que contenga alguna plaga o enfermedad.
Después de trabajar durante ocho años detectando alimentos en los equipajes de los pasajeros que entraban a México, Harley se jubiló y ahora se dedica a dar tranquilidad a quien la necesite con solo dejarse acariciar y abrazar. De hecho, es el primer lomito en ser parte de este programa de acariciar perros en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México.
Si te encuentras a Harley y quieres conocer su historia en ese momento, escanea el código de su chaleco. Para que sepas quién es, por si te lo encuentras en los pasillos.
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