Mientras el mundo creía que la utilidad del Viagra creado por Pfizer no se extendía más allá del lecho amatorio, un nuevo estudio publicado en The International Journal of Clinical Practice, y patrocinado por la farmacéutica, ha demostrado que, de cierta forma, ayuda a mejorar el rendimiento laboral.
El estudio sostiene que la disfunción eréctil está relacionada con el absentismo laboral y el “presentismo”, es decir, cuando se presenta a trabajar, pero no se desempeña mejor debido a problemas de salud subyacentes.
El estudio tomó como muestra a 52 mil 697 hombres de ocho países. 7% tenía disfunción eréctil y faltaron al trabajo, en relación a sólo el 3% que no presentaban disfunción, pero también faltaron al trabajo.
Mientras tanto, el 22.5 por ciento de los hombres con disfunción eréctil informaron preceptismo pero sólo el 10.1 por ciento sin síntomas hizo lo mismo. El estudio demostró que los pacientes con disfunción eréctil tienen el doble de impedimentos en la productividad laboral en comparación con los que no.
La idea de que la disfunción eréctil podría afectar el rendimiento laboral puede no ser tan descabellada como parece. Investigaciones anteriores han señalado que afecciones como la artritis, las alergias o la depresión también pueden afectar el rendimiento laboral. Los estudios también sugieren que los empleadores finalmente se benefician de invertir en tratamientos para esas afecciones debido a las pérdidas de productividad que causan.
La división de Pfizer responsable de la fabricación de Viagra, llamada “Upjohn”, registró una caída del 9 por ciento en las ventas en Estados Unidos a principios de este año en su informe de ganancias del segundo trimestre. La patente de Pfizer sobre Viagra había expirado, lo que significaba que los medicamentos genéricos (o, en algunos casos, los obtenidos ilegalmente ) que contienen el mismo ingrediente, sildenafil, pueden competir con él por la participación en el mercado.