Una de las principales razones por las que surgieron las monedas electrónicas en el mundo fue la de crear un mecanismo de pago global independiente de los gobiernos. Algunos proyectos de este tipo han sido más exitosos que otros, pero, en realidad, su uso aún no se ha generalizado por completo. Sin embargo, parece que este panorama está por cambiar, al menos en China, donde algunos ciudadanos han estado recibiendo yuanes digitales.
La ciudad de Shenzhen se encuentra liderando un proyecto cuyo objetivo es la prueba del yuan digital en el país asiático. Esta semana, el Gobierno chino emitió 10 millones de yuanes en moneda digital que fueron entregados a poco más de 50 mil residentes seleccionados al azar.
De acuerdo con medios locales, las autoridades distribuyeron el dinero a través de unos “sobres rojos” móviles, una herramienta diseñada para emular la costumbre de regalar dinero en paquetes rojos y que fue altamente popularizada por la billetera electrónica de WeChat. No obstante, diversos especialistas aseguran que el yuan digital no puede ser considerado como una forma de criptomoneda, debido a que, precisamente, esta es emitida y administrada por el Banco Central de China; es decir, que en realidad se trata de la versión digital de la moneda física. Incluso las propias autoridades asiáticas han reiterado que esta opción está destinada a complementar, no a reemplazar.
Y es que monitorear de mejor manera la circulación del dinero permitirá al Gobierno chino detectar de más fácilmente posibles casos de corrupción y desvíos de fondos.
Shenzhen no será la única ciudad que adoptará este modelo, ya que existen otras tres que comenzarán las pruebas internas del yuan digital en las próximas semanas. Sin embargo, la distribución a los consumidores en Shenzhen se considera la primera prueba pública a gran escala de China.