Durante los úlrimos años, han existido diversos rumores relacionados al daño que pueden causar los imanes a un smartphone. Estos objetos son conocidos por ser capaces de generar campos magnéticos, los cuales son invisibles para el ojo humano, pero dan origen a una fuerza que puede atraer y repeler otros imanes o materiales magnéticos.
Por más soprendente que parezca y a pesar de los rumores, estos objetos son comúnmente utilizados para funciones dentro de nuestros dispositivos móviles, pero la preocupación surge cuando las personas se preguntan si algún imán externo puede dañar o incluso destruir estos objetos.
La respuesta ante este cuestionamiento que ofrece First4Magnet, una compañía experta en imanes y electromagnetismo, señala que, para poder hacer daño, este objeto debe de ser lo suficientemente grande y fuerte. Pero lo anterior únicamente sucedería con un imán de gran magnitud, el cual no se encuentra al alcance de la gran mayoría de las personas comunes.
“Los imanes grandes sí pueden llegar a generar un campo magnético capaz de dañar computadoras, celulares y aparatos electrónicos en general”, confirma la empresa.
Sin embargo, los smartphones se han ido modernizando y los efectos de los imanes tambien cambiaron, principalmente de los pequeños. Ejemplo de ello es que algunas partes y funciones de los celulares sí eran susceptibles a los imanes en el pasado, tal es el caso de las pantallas, memoria de almacenamiento, brújula, ubicación y altavoces. Afortunadamente, los pasos agigantados de la tecnología pudieron resolver estos incovenientes.
En conclusión, no todos los imanes pueden destruir o generar daños graves en tu teléfono celular, a menos que éste se exponga directamente ante un imán de gran potencia.