Medio siglo después del fin de la era Apolo de la NASA, la tan esperada apuesta de la agencia espacial estadounidense por volver a llevar a los astronautas a la superficie lunar se encuentra, al menos, a tres años de distancia, con gran parte del hardware necesario todavía en la mesa de diseño.
Sin embargo, este próximo lunes la NASA pretende dar un salto gigante en cuanto a sus ambiciones lunares con el lanzamiento de un megacohete de nueva generación: el Sistema de Lanzamiento Espacial (SLS) y la cápsula de tripulación Orion.
De acuerdo con la institución, la nave combinada SLS-Orion despegará a las 07:33 h desde el Centro Espacial Kennedy, en Cabo Cañaveral, enviando la cápsula sin tripulación humana, pero con un grupo de maniquíes, alrededor de la Luna y de vuelta a la Tierra.
“El viaje tiene como objetivo someter al vehículo SLS-Orion, considerado el cohete más complejo y potente del mundo, a una rigurosa prueba de sus sistemas durante un vuelo real antes de considerarlo listo para transportar astronautas”, dijo Bob Cabana, administrador asociado de la NASA.
De igual manera, el también antiguo piloto y comandante de transbordador espacial, explicó que la nave SLS-Orion representa más de una década de esfuerzos humanos y una inversión de poco más de 30 mil millones de dólares.