Patrick O'Connell, propietario y chef de un restaurante con tres estrellas Michelin ubicado en Little Washington (Virginia, E.U.), ha ideado un plan para cumplir con las medidas de distanciamiento establecidas para minimizar los contagios de COVID-19.
Con la intención de evitar que el restaurante The Inn luzca semivacío, este empresario colocará maniquíes de tamaño natural a los que atenderán sus empleados, en los lugares de la sala que no ocupen sus clientes.
Estos muñecos vestirán ropa de los años 40 gracias a la ayuda de un teatro local con el que O'Connell ha colaborado en el pasado, mientras que los trabajadores llevarán mascarillas estampadas con imágenes de personalidades como Marilyn Monroe o George Washington.
Esta medida "dejará mucho espacio entre los visitantes reales, arrancará algunas sonrisas y provocará algunas fotos divertidas", aseguró Patrick O'Connell.