Misteriosos círculos sin vegetación se habían visto en las praderas áridas de Namibia; se creía que eran el único lugar del mundo donde aparecían, hasta que fueron descubiertos en Australia, incrementando el misterio.
Hace poco, científicos buscaron la explicación del origen de los misteriosos círculos de hadas en los desiertos utilizando una teoría de hace 70 años, elaborada por Alan Turing, y los resultados han sido sorprendentes.
¿Qué son los círculos de hadas?
Los círculos de hadas o anillos de hadas son extrañas formaciones circulares sin vegetación, pero con un anillo de vegetación a su alrededor, que pueden tener distintos tamaños, desde dos, hasta quince metros de diámetro. El nombre "círculo de hadas" proviene de la creencia de que estas formaciones eran portales al mundo de las hadas.
Varías teorías explican la formación de los círculos de hadas, entre ellas figuran la filtración de gases naturales, que emanan de las profundidades creando este fenómeno. Otra explica que las termitas de arena debajo del suelo africano eran las responsables de la creación de estos círculos, pero después de descubrir la aparición de estas formaciones en Australia, la teoría ya no resultó tan confiable, pues bajo el suelo australiano no habitan termitas. Finalmente, la teoría de la formación de patrones naturales, que también fue motivo de debate.
La teoría del «patrón de Turing» y los círculos de hadas
Alan Turing, matemático británico, planteó la teoría de la formación de patrones naturales en 1952. La llamada teoría del «patrón de Turing» explica el surgimiento de patrones y estructuras en los sistemas naturales, desde un embrión, hasta las rayas de una cebra.
¿Cómo se aplica esta teoría en el caso de los círculos de hadas?
Los científicos proponen que los círculos de hadas son el resultado de que la vegetación se organiza para optimizar el agua en un ecosistema árido. Para probar la teoría, un grupo de investigadores inspeccionó los círculos de hadas de Australia con la ayuda de drones.
¿Qué encontraron?
Al utilizar sensores de humedad, descubrieron que los pastos más saludables se encontraban más asociados con los círculos de hadas que los de menor vitalidad. Es decir, que los pastos están diseñando su propio entorno, formando patrones de huecos espaciados simétricamente. La vegetación aprovecha el agua que escurre gracias al diseño de los grandes círculos, por lo que el ecosistema árido puede estar en buenas condiciones. Sin la autoorganización de los pastos, esta área probablemente se convertiría en un desierto, explicó Stephan Getzin en su nuevo estudio. De modo que la vegetación que forman los círculos de hadas coopera entre sí para sobrevivir en un lugar extremadamente seco.
El equipo de investigadores reconoce que se necesita más trabajo para validar este modelo matemático, que podría poner fin a un misterioso fenómeno que los ha intrigado por décadas.