En la cumbre del Monte Kelimutu, una isla volcánica ubicada al sur de Indonesia, existen tres lagos de cráter cuyas aguas poseen tres colores diferentes que cambian todo el tiempo. Es el único lugar en el mundo donde existe esta asombrosa "variación".
El primer lago tiene el nombre de Tiwu Ata Mbupu (Lago de las almas de los antepasados); el segundo, Tiwu Nuwa Muri Koo Fai (Lago de las almas de los jóvenes), y el tercero, Tiwu Ata Polo (Lago de espíritus malignos). Los dos primeros están situados muy juntos, mientras que el tercero se halla a unos 1.5 km al oeste.
Los lagos Kelimutu son impredecibles respecto de cuándo y de qué color se tornarán sus aguas. Algunas veces, sus colores son azul, verde y negro, y otras cambian a blanco, rojo y azul. La última vez que un viajero los observó, tenían una tonalidad marrón oscuro, como si de un estanque de chocolate se tratara. Anteriormente, las aguas del lago este eran rojas y las del lago medio, azules.
Mientras que otros lagos de aguas coloradas en el mundo a menudo obtienen sus matices de ciertas especies de bacterias, los lagos de Kelimutu son un poco más misteriosos, especialmente porque sus colores cambian con mucha frecuencia. Los lugareños creen que ciertos minerales en el agua interactúan con los gases volcánicos para crear los tonos mercuriales, pero es difícil saberlo con certeza.
Como los lagos cambian sus tonalidades frecuentemente, los turistas nunca pueden estar seguros de qué color serán cuando los visiten. Sin lugar a dudas, el Monte Kelimutu, con sus lagos de cráter tricolores, es uno de los fenómenos naturales más sorprendente que ofrece la Isla de Flores.
