Esta semana, el Museo del Louvre en París, Francia, cumplió 230 años de historia, durante los cuales ha conformado un acervo difícil de igualar por otros espacios.
Con motivo de dicha celebración, te presentamos algunas de las obras más emblemáticas de su colección, mismas que en su momento también contribuyeron a la historia del arte.
-“La Gioconda” de Leonardo da Vinci: También conocida como la “Mona Lisa”, esta pieza es, sin duda, la que más atrae turistas al Museo del Louvre.
Según expertos, representa el retrato de la joven Lisa Gherardini, esposa de Francesco del Giocondo, y se encuentra pintada al óleo sobre una tabla de álamo de 77 x 53 centímetros.
-“La Balsa de la Medusa” de Théodore Géricault: Creada en 1819, la presente obra está basada en hechos reales y durante su época estuvo envuelta en gran polémica, pues en ese entonces la política no solía ser blanco de críticas.
Sin embargo, Géricault decidió dar a conocer al mundo una tragedia que ponía de manifiesto la ineficacia de la política francesa, sobretodo del rey Luis XVIII.
-“Las Bodas de Caná” de Paolo Veronese: De acuerdo con un artículo publicado por el mismo inmueble, este cuadro pintado al óleo fue el resultado de 15 meses de trabajo del artista italiano, quien en 1563 hizo entrega de él al convento benedictino de San Giorgio, ubicado en la ciudad de Venecia.
Para esa ocasión, Veronese retrató a Cristo en la última cena, no sin antes agregar más elementos, como partes diferenciadas; personajes recortados; y arquitectura típica del estilo manierista.