Los Judas por años se han convertido en el toque colorido de cada Semana Santa, detrás de estas figuras hay un trabajo detallado y minucioso de los artesanos.
Tal es el caso de Pablo Salazar un joven originario de San Mateo Tlalchichilpan,Almoloya de Juárez, quien este año su Judas representa un titiritero que maneja los hilos sobre el uso y el gasto desmedido de agua; este demonio socava la voluntad de quienes deberían proteger los recursos naturales y manipula todo.
“Ahorita estamos trabajando varias piezas con otros compañeros, las piezas tocan distintas temáticas por ejemplo una toca lo que es la apropiación cultural, yo voy a tocar el tema del agua y por ejemplo mi compañero Oscar, va a tocar el tema de los campesinos que no está siendo valorado”.
La imagen también representa una crítica a las empresas trasnacionales estadounidenses que son las que más agua consumen en territorio mexiquense.
“Tomé la referencia del Dios Tlaloc, por la importancia que tiene para la cultura Mexica, lo tomo como el recurso del agua y eso quiero reflejar, que aunque era un dios, estas empresas pueden manipular todo”.
Recordemos que el alma de los Judas es el carrizo, que para un concurso tradicional es el que hace que la pieza no sea tan pesada, además de que si la queman no es un material peligroso.
“Nos lleva como un mes, realmente no le dedicamos todo el tiempo completo a las piezas aunque ahorita andamos un poco apurados, pero por otras actividades acomodamos los tiempos, y por el proceso de la cartonería que se tienen que dejar secar”.
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Conforme pasan los años, son menos los juderos que durante Semana Santa presentan sus piezas, el año pasado se contabilizaron menos de 100 personas quienes decidieron llevar al Centro Cultural Mexiquense, sus obras para ser exhibidas al público.
“Es como muy complejo, pero muchas veces ya las familias compran el Judas, aparte de que en el concurso demanda calidad de más tiempo y los parámetros que no sabemos que califican”.
Pablo, al igual que otros artesanos coinciden que aún cuando elaboran sus piezas para concursar, la principal finalidad es que la tradición nunca muera.