¡Ay, nanita! Descubren la abeja “Lucifer” con cuernos diabólicos
La prueba más reciente de ello es la Megachile lucifer, una abeja cuya característica principal son un par de pequeños y diabólicos cuernos.
La prueba más reciente de ello es la Megachile lucifer, una abeja cuya característica principal son un par de pequeños y diabólicos cuernos.
Este hito científico forma parte del Proyecto Colaboración Monarca, una iniciativa trinacional (México, Estados Unidos y Canadá) que busca mejorar el monitoreo de las monarcas para elaborar nuevas iniciativas de conservación y protección.
Se trata de la Aulonia albimana, también conocida como “Araña lobo de nudillos blancos”, que según un artículo del periódico The Guardian fue localizada por los entomólogos Mark Telfer y Graeme Lyons
Un nuevo estudio publicado en la revista Science reveló que las hormigas también adoptan estas estrategias, ajustando su entorno para reducir los contagios dentro de sus respectivas colonias.
Según expertos, su apariencia puede resultar engañosamente atractiva debido a su cuerpo peludo, lo cual la hace muy peligrosa para niños, adultos mayores y mascotas, quienes podrían intentar tocarla.
De acuerdo con un nuevo estudio liderado por el Instituto de Ciencia y Tecnología de Okinawa (Japón), este tipo de descensos poblacionales alertan sobre cómo los insectos, cruciales para mantener ecosistemas saludables, se adaptan al mundo moderno.
En un artículo para la revista ZooKeys, Alireza Zamani, aracnólogo de la Universidad de Turku (Finlandia), explicó que las hembras Satyrex son extremadamente agresivas, por lo que especula que los machos desarrollaron genitales gigantescos para mantener una distancia más segura durante el apareamiento.
En un comunicado, la dependencia detalló que estos insectos llevan por nombre: B. chullachaqui; B. chocoensis; B. onorei; B. aratrifer; B. longiventer; B. cerroblanco; B. canelazo; B. pectinifer; B. arachnoides; B. amasanga; B. yasuní; y B. grandis.
Partiendo de que los insecticidas son productos que tienen como base químicos sintéticos denominados piretroides, un equipo de científicos reveló una disminución en la capacidad de estos repelentes.
Se trata del Acrophylla alta, una variante de insecto palo gigante, el cual pesa 44 gramos y mide 40 centímetros de largo.