El hecho ocurrió en el sector conocido como la cuesta de La Cucamonga, un peligroso cruce ubicado en el kilómetro 171.5 de la carretera Panamericana, en el distrito de Condega, departamento de Estelí, en el norte del país. Los cadáveres fueron trasladados al Instituto de Medicina Forense de Managua, de acuerdo con el reporte.
Sólo 93 de ellos están bajo resguardo de las autoridades y otros fueron atendidos en el hospital del municipio de Oluta.
En el operativo implementado también se logró la detención de dos hombres, quienes fueron presentados ante la autoridad competente para deslindar responsabilidades.
Alrededor de las 12:30 horas elementos de la Guardia Nacional permitieron el ingreso de las carrozas al hangar denominado “Plataforma Remota de la Terminal Aérea”, luego de que a las 13:48 horas aterrizara la aeronave de la Fuerza Aérea Mexicana procedente de San Antonio con los siete cuerpos.
Los primeros ocho cuerpos de migrantes que perdieron la vida en un tráiler en San Antonio, Texas, llegaron al aeropuerto de Toluca en un avión de la Sedena.
Según Arturo Rocha, coordinador para América del Norte de la cancillería, los funcionarios van a bordo en un avión militar de la Fuerza Aérea Mexicana con destino a San Antonio.
El migrante mexiquense reconoció que otros de sus connacionales sufrieron de abandono por parte de los “polleros” en pleno desierto.
El mexiquense de 32 años, era padre de dos menores y de profesión herrero, pero ante la falta de trabajo le propusieron ir en busca del “sueño americano” para mejorar las condiciones de vida de su familia.
Durante la conferencia de prensa matutina de este miércoles, el funcionario ofreció nuevos detalles de la tragedia e informó que la persona que conducía el camión color rojo marca Volvo fue identificado como Homero ‘N’ quien enfrenta cargos de tráfico de personas y homicidio.
De acuerdo con medios internacionales, la unidad se encontraba en la manzana 9600 de Quintana Rd, cerca de la autopista New Laredo, en Southwest Side.
