La inflación mexicana sorprendió a analistas este jueves al situarse en un 7,45 % interanual en la primera quincena de diciembre, lo que implica una desaceleración aunque se mantiene en su nivel más alto de las últimas dos décadas.
El Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) aumentó 0,10 % frente a la quincena inmediata anterior, "el menor incremento quincenal para dicho periodo en la historia del índice", informó Julio A. Santaella, presidente del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
En noviembre pasado, México registró una tasa de inflación general del 7,37 %, el mayor incremento de precios desde 2001.
La inflación registrada esta primera quincena de diciembre es mayor a ese dato, pero menor al 7,7 % anual que se reportó solo dentro del periodo de la segunda quincena de noviembre.
El índice de precios de la canasta de consumo mínimo, formada por 176 productos y servicios, presentó una reducción quincenal del -0,05 % aunque un crecimiento anual de 8,26 %.
La inflación del periodo estuvo por debajo del consenso de 7,7 % que esperaban los analistas privados, afirmó Alejandro Saldaña, economista en jefe del Grupo Financiero Ve por Más (Bx+) en un análisis enviado a Efe.
El dato puede implicar que "la inflación se moderará en 2022 y podría cerrar dentro del rango de tolerancia del Banco de México (Banxico)" del 3 %, observó Saldaña.
"Menores presiones en el componente no subyacente (frutas y verduras, energéticos) incidieron en que la inflación anual se moderara por primera vez en cuatro lecturas", destacó el analista.
El incremento quincenal de 0,10 % "sorprendió a la baja por primera vez en mucho tiempo ante la expectativa de 0,34 %", resaltó Jonathan Heath, subgobernador de Banxico, en sus redes sociales.
Analistas expresaron preocupación por el aumento anual del 5,87 % del índice de precios subyacente, considerado un mejor parámetro para medir la carestía general porque elimina artículos de alta volatilidad en sus precios.