La Fiscalía General de la República (FGR) ya no requerirá como testigo por el caso de espionaje con el software Pegasus al exsecretario de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México, Omar García Harfuch, quien encabezó la Agencia de Investigación Criminal (AIC) de la entonces Procuraduría General de la República (PGR) de septiembre de 2016 a junio de 2019.
La Fiscalía Especial para la Atención de Delitos cometidos en contra de la Libertad de Expresión (Feadle) presentó formalmente una petición ante el Juez de control del Centro de Justicia Penal Federal con sede en el Reclusorio Sur durante la audiencia de Juan Carlos García Rivera, quien está acusado de ser probable responsable del delito de intervención ilegal de comunicaciones con el software Pegasus contra activistas, empresarios y periodistas durante el sexenio de Enrique Peña Nieto.
Con la petición, la FGR decidió que no llamará a García Harfuch como testigo para declarar en el juicio que comenzó el pasado 4 de diciembre contra el acusado de intervenir y espiar conversaciones privadas de alrededor de 15 mil personas, entre las que figura la periodista Carmen Aristegui, quien, hasta el momento, es la única persona acreditada como afectada por el malware espía ante el Poder Judicial de la Federación, pese a que más de 10 personas han denunciado que también fueron víctimas de espionaje con Pegasus.
Según han informado diversos testigos, el programa, de fabricación israelí, fue diseñado para infiltrarse en dispositivos de cómputo, y así robar datos y causar daños e interrupciones en los sistemas operativos, sin conocimiento ni autorización de sus dueños.
Además de cancelar la comparecencia de García Harfuch, quien ahora es precandidato al Senado de la República por Morena, la Feadle tampoco llamará a atestiguar a Cristian Noé Ramírez Gutiérrez, exadministrador de Pegasus en la ya extinta Procuraduría General de la República (PGR), ni a Gustavo Salas Chávez, exprocurador especializado en Investigación de Delincuencia Organizada, entre otros funcionarios.
Éstos y otros testigos estaban citados en el Centro de Justicia Penal Federal del Reclusorio Sur para dar su testimonio en las audiencias de juicio oral contra Juan Carlos García Rivera, quien fuera exempleado del corporativo KBH, que comercializó Pegasus y sus licencias en México. Dicha empresa fue proveedora de distintas dependencias federales en el sexenio pasado.
El dueño de dicha empresa, Uri Ansbacher Bendrama, ha sido señalado por testigos protegidos de haber apoyado a Enrique Peña Nieto y al exsecretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, en las acciones de espionaje contra las personas afectadas.
Se presume que García Rivera recibía órdenes de Uri Ansbacher, y éste a su vez seguía instrucciones por parte de Peña Nieto y Osorio Chong.
La FGR decidió no interrogar a 31 de los 82 testimonios que estaban programados en el caso, pues “podrían ser repetitivos o sobreabundantes de cuestiones que ya han sido probadas durante audiencias previas”, y consideró que, de citar a los exfuncionarios, se caería en redundancia, dado que el propósito de sus comparecencias era confirmar la compra de Pegasus por la PGR y la administración priista, hecho que ya había sido acreditado gracias a otras declaraciones obtenidas en días anteriores.
El Jefe de la Unidad de Asuntos Jurídicos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), el General Brigadier Pedro Bonilla señaló en la audiencia de ayer jueves que la PGR adquirió Pegasus entre 2011 y 2013.
En tanto, la defensa de García Rivera argumentó que no solamente dicha dependencia empleaba el programa, pues también la Secretaría de la Defensa Nacional hacía uso del malware para fines de espionaje.
Las audiencias serán reanudadas el próximo 5 de enero, según declaró el abogado del acusado, y añadió que el 9 de enero será la fecha estimada para que se emita el fallo por parte del Juez.
Información de: https://www.sinembargo.mx/